No dejéis de escuchar buena música

Este mes de noviembre ha sido muy largo. Este mes de noviembre nos ha anunciado el invierno y, sin embargo, todavía nos ha recordado la calidez de los días claros y templados tamizados por la luz del otoño. Este mes ha sido muy largo y cansado. Y hoy, con el gran puente casi finalizado, la cabeza más aclarada en cuanto a las tensiones diarias, con la Navidad en la puerta, me pongo a escribir. Ha tenido que pasar todo el mes para encontrar algo para escribir.
Hace tiempo escuchaba un programa de música en Radio Nacional, a eso de las tres y media, sobre la llamada música "new age". Era un programa de Ramón Trecet, muy agradable, pionero por entonces, y que trataba de ofrecernos un mar de músicas que se salían de los estilos que ya conocíamos. Sonaban a jazz pero no eran jazz, tenía unos toques de música folk pero se escuchaban instrumentos electrónicos. La primera impresión era de música extraña, porque no estábamos acostumbrados a esos timbres. La razón de rememorar a este periodista era la despedida del programa en la que nos animaba a los oyentes a buscar la belleza como lo único que valía la pena en esta sociedad en la que convivimos.
Pues este fin de semana he aprovechado para ir al cine. He visto una película que merece la pena ser vista por lo que nos cuenta. Me refiero a "Los chicos del coro". Una película sobre un internado en los años cuarenta para chicos con problemas. En principio no muestra ninguno de los tópicos que estamos acostumbrados con las historias de internados. La música tiene un papel protagonista como elemento reeducador, sirve como nexo de unión y de convivencia. No os la perdáis, es muy agradable de ver, muy poética y da buenas sensaciones.
Sería muy interesante dedicar todos los días a escuchar una composición, da igual el estilo, pero con todos los sentidos puestos en ello. Una música que no la pongamos de acompañamiento de otra actividad y que dejemos que nos impregne y que nos mueva lo que quiera. Es como hacer diez minutos de meditación. Es como tres minutos de belleza diario. Empecemos a probar.